
Para el cementerio cogemos tierra del río. De la orilla del río. El primo A. dice que así no escarbarán los perros. Los galgos del loco siempre hacen cosas malas. Al tío G. le mordieron una vez. Le han matado gallinas a la amiga de la abuela. Siempre hacen cosas malas. Siempre se dice en casa. Cogen los peces muertos de las piedras y los sueltan cerca de las puertas. En las puertas de las casas. Para que se maten los gatos y para matar a los que no se matan. Papá se ha quejado en el ayuntamiento. Para que hagan algo con los perros del loco. O con el loco. Para que le quiten los perros. El agua huele fuerte. No baja limpia. Papeles. Trozos de plástico. Colillas. Le pregunto al primo A. si le gustan dos palos que he cogido. Para la cruz. No. No quiere cruz. No quiere poner nada. No quiere señalar nada. El loco a veces baja al río. Con sus perros o solo. Baja y se echa en la orilla. Y pesca. Y bebe cerveza. O se duerme. No quiere que sepa dónde enterramos al pájaro. A la cría de pájaro. Lo encontró en el huerto del abuelo. El tío G. dijo que había que buscar su nido. Devolverlo. Pero buscamos y buscamos y no encontramos nada. En ningún árbol. El tío G. nos dijo que le hiciéramos uno. En lo más alto. En el árbol más alto. Que cogiéramos una caja y metiéramos ramas y hojas dentro. Y lo hicimos. Cogimos la caja de galletas de la abuela. Sacamos las que quedaban. Todas menos una. Las metimos en un tarro y nos llevamos la caja. Al huerto. Recogimos hojas y ramas. Las más blandas. Para que la cría de pájaro estuviera bien. Y la metimos dentro. Con la galleta triturada, para que no tuviera hambre. Lo metimos todo dentro y el primo A. se subió al árbol más alto del huerto. Y encajó la caja como pudo. Se bajó y nos escondimos. Por si venían los padres. Pero no vino nadie. No vino nadie. Nos fuimos a cenar y al día siguiente la cría se había matado. Estaba en el suelo. Con la lengua fuera. Con los ojos fuera. Se había caído y se había matado. Se lo dijimos al tío G. y nos mandó al río. A por tierra mojada de la orilla. Para enterrar es la mejor, nos dijo. Le pregunto al primo A. si vamos a contar en casa dónde hemos enterrado a la cría. Me dice que no.
Fin